lunes, 20 de octubre de 2014

Desconocidas peliculas bélicas en las que sale el Afrika Korps

                           
 
            
 


 
   
 
     

        

 
 
        
      

 






lunes, 13 de octubre de 2014

Grandes y conocidas peliculas de la Segunda Guerra Mundial en las que sale el Afrika Korps

Comando en el desierto (1971)  "Raid on Rommel" 

        

 Rommel (2012)
 
 
 La película fue de producción francesa, austriaca, pero sobre todo alemana. Si bien se centra en la parte final de la vida Rommel, o séase la Operación Valkiria y la organización de las defensas de Normandía contra el día D,tiene menciones al Afrika Korps. La película se lanzó para tele y DVD, se dobló inmediatamente al español. Por lo que es fácil de encontrar. Pese a ello es buena, en calidad de imagen y de actores, destaca Ulrich Tukur haciendo de Rommel. Está muy bien para conocer la construcción de los búnkeres de las costas francesas y las opiniones reales de Rommel, de como hacer fracasar un desembarcos aliado. Cosa que por desgracia, el Alto Mando alemán oco tuvo en cuenta. Aparecen personajes como Von Rundstedt y el propio Hitler. Y por supuesto los preparadores de la "Operación Valkiria". Es interesante pues está hecha por propios alemanes y sin un enorme presupuesto. Tiene algunos puntos flojos, pero tiene bastante documentación y se agradece. Eso sí, espero que algún día, para deleite de los admiradores de Rommel, hagan una verdadera biografía de su vida en el cine, empezando desde su niñez y acabando con su fatídico final. Y el actor no sería otro que Ed Harris, y ya para culminar, la película debería dedicarle al menos un tercio de su tiempo al gran Afrika Korps. Viendo los presupuestos de Hollywood no seria difícil, el problema es la ideología de los que allí mandan, que dan dinero para fantasmadas como "Malditos Bastardos".
                          

Rommel, el Zorro del Desierto (1951) "The Desert Fox: The Story of Rommel"             

                           
         

       

 
            

Tobruk (1967)

También tuvo buena acogida en España. Por lo general es una buena película, con bastante acción, pese a algunas garrafadas históricas. El protagonista principal es Rock Hudson. Que hace de mayor del ejército canadiense y he aquí uno de los fallos de la película, que Canadá no participó en el Norte de África, quitando a observadores y asesores. Pues Canadá no tendrá una actuación seria hasta la invasión de Sicilia. Otra curiosidad es el papel de George Peppard, que luego se haría famoso por ser Aníbal Smith en el "Equipo A". Los efectos visuales y la calidad de imagen es muy buena, tanto que tuvo nominación al Oscar. La película está ambientada en septiembre de 1942, Peppard y Hudson, mandan un comando británico, que tiene en sus filas judíos alemanes. Estos tienen que infiltrarse en las líneas alemanas y destrozar las instalaciones del Eje en Tobruk, el principal puerto para que sostengan su frente egipcio. Esta parte si es real, pues el Long Range Desert Group, hizo esta operación provocando caos en los alemanes. Aunque al final los que perdieron fueron los ingleses. Pese a tener cosas ficticias, es una buena película bélica y con acción, como "12 del Patíbulo" y "Los Cañones de Navarone", aunque algo ligeramente por debajo de éstas en calidad.
 

Un taxi para Tobruk (1961)
"Un taxi pour Tobrouk"

Esta película de principios de los 60, es francesa, en general es buena la fotografía del español, Salvador Torres es más que aceptable. Mezcla película bélica con drama. No es enrome la película, pero es bonita. Va de un grupo de 4 hombres aliados, que tras escapar de las batallas de Tobruk y sobrevivir a los ataques alemanes, atacan a un grupo de alemanes y matan a todos salvo a un capitán alemán que porta la Cruz de Hierro. Poco a poco surgirá una amistad con sus captores. La película tiene claramente un mensaje antibélico. Os dejo un buen resumen de la película:
 
     
La acción se sitúa en el Norte de África, a finales de 1942. Tras una incursión de los comandos aliados contra las instalaciones alemanas en Tobruk, un grupo de cuatro soldados franceses supervivientes se interna en el desierto para volver a sus lejanas posiciones en El Alamein. Sin embargo, cuando su vehículo se estropea, no tendraán otro remedio que caminar por el desierto. Casualmente topan en su camino con una patrulla alemana a la que eliminan, capturando su vehículo y a un prisionero, un oficial alemán, el capitán Stiegel. Pese a que la relación de este con sus captores se inicia con desconfianza, a lo largo del peligroso camino de regreso acabará por nacer un sentimiento de camaradería entre todos los integrantes del grupo.

Nacida como coproducción europea, con capital esencialmente francés “Un taxi para Tobruk”, supone un curioso alegato antibelicista, en una época, como los años 60, en la que el cine bélico era más dado a reflejar la épica de la guerra que a mostrar sus miserias. Con un planteamiento argumental que recordó mucho al clásico “Sahara” la película nos muestra una historia convencional, aunque bien llevada, con el tema central de la natural fraternidad humana como eje. En general el desarrollo de la historia resulta algo lento, aunque los personajes, bien dibujados, consiguen dotar de mucha humanidad a la historia. El principal fallo es que la ausencia de acción hace que el metraje (de solo hora y media) parezca más largo de lo que es, aunque esto se suple en parte con unos diálogos no sobresalientes, pero sí bien elaborados y naturales. Un aspecto que no me gustó mucho es que la amistad entre el alemán y sus enemigos surge de forma un poco injustificada, aunque dado es escaso metraje supongo que no podía desarrollarse más en profundidad la evolución de los personajes.                      


sábado, 11 de octubre de 2014

"Cisne, yo fui espía de Franco"-Uno de los libros más controvertidos de España

El libro pese a sus pocas ediciones se vendió bien en España y otros países como Francia. El autor, espía español, quiere dar sus propias versiones de hechos oscuros de la vida política internacional de los años 50 y 70. Como trabajó para múltiples servicios secretos, aunque principalmente para el SIM de España. Que fue competente, con buenas redes en muchos países como Francia y Argelia. es a destacar el apartado dedicado a las relaciones en la España de Franco y la URRS, que parecieron admirarse y tuvieron unas relaciones económicas donde España salió ganando en todo. Encima controlando la entrada de espías rusos, no pasó lo mismo con la CIA que poco a poco subyugó a la mayoría de servicios españoles. muchas de sus afirmaciones no carecen de validez, como los tejemanejes entre España y Marruecos para que este país fuera independiente y devolver la patada a los puñetas que Francia hizo a España. También se repiten sus encarcelaciones, casi todas injustas, por supuestas traiciones a los servicios argelinos o franceses. O la implicación de la CIA en el asesinato de Carrero Blanco. También el infiltrado en el gobierno de Brandt, que era su mano derecha Guillaume, agente de Alemania Oriental. Un libro que pese a estar algo novelado no dejará indiferente a nadie. Como su libro "Terrorismo internacional" publicado en 1977, donde desvela cosas sobre ETA y explica con mayor profundidad el atentado a Carrero Blanco. No es nada difícil encontrarlo de 2ª mano en algunas librerías webs. Una lectura más que recomendable si no te crees las verdades oficiales. Pese a lo que pueda decir Fernando Rueda, hay muchas cosas comprobadas de Gonzales Mata, como la muerte de Trujillo, el famoso topo de Brandt y las relaciones hispano-soviéticas.

Dejo aquí la reseña del blog "Crónicas de Hispania", donde aparecen las pocas fotos de Cisne (seguramente ya fallecido), que circulan en la red:

Mercenario del espionaje y polémico escritor


La historia de Luís González Mata “Cisne” es de película. Un “James Bond” ibérico. Real como la vida misma.

Ser espía es una profesión complicada y arriesgada. Pero jugar a varias bandas y vivir en permanentes carambolas ya es una tarea reservada para personas hechas de otra pasta. Este es el caso del asturiano Luís M. González Mata. Conocido con el sobrenombre de “Cisne”.

Fue reclutado por los servicios secretos del franquismo. El Servicio de Información Militar (SIM) que coordinaba Eduardo Blanco. Y luego empezó a llenar su currículum con trabajos para distintos “clientes”: Perteneció a la seguridad del dictador dominicano Trujillo, y también colaboró con los servicios secretos franceses, los argelinos, la KGB y mismo con la CIA. Un espía “ibérico” de película. Un hombre que dio varias vueltas de tuerca al trabajo de agente secreto, como si quisiera entonar al redobles de los tambores el “más difícil todavía”. Si ser “agente doble” debe de ser vibrante, imagínense superar el listón. Y con misiones de cierta relevancia como las que tuvo “Cisne”.

Después de destacar en el servicio español y en el  servicio de documentación del ministerio de Presidencia hispano, fue enviado para ayudar al gobierno de Trujillo. Ahí ya comienza a entrelazar “trabajos” entre unos y otros .




“Cisne. Yo fui espía de Franco”

 Después de unos agitados años habitando las alcantarillas del poder, Luís González Mata rizó el rizo, publicando el libro “Cisne. Yo fui espía de Franco” en París en 1976. Quiso contar sus experiencias en un estilo novelado y no exento de polémica.
En el polémico libro abre el fuego de la primera página en donde asegura que los agentes secretos “no sirven para nada” pero “por desgracia los agentes secretos no se conforman con ser inútiles, además quieren ser peligrosos”.

Como si quisiera ajustar cuentas o redimirse de algún pecado ataca lo que fue su principal oficio: “Lo único que justifica la existencia de los agentes secretos es el desorden público y así para sobrevivir alimentan ese desorden público con toda clase de escándalos y atentados”.

En aquellos años el autor se quejaba que la obra no tuviera excesivo eco en España. Hay quién sostiene que algún gobierno optó por no darle importancia a la publicación ni tomar represalias “y prefirieron el silencio para no ampliar con sus críticas el número de lectores”(F.Rueda).





“González Mata trabajaba para todos”


Uno de los escritores que trató sobre Luís M. González Mata es Fernando Rueda. En su libro “Espías y traidores” (La Esfera de los Libros) dedica un capítulo a un personaje que define como “una figura apasionante”. En una reciente entrevista Rueda nos trazó las líneas básicas de la figura de “Cisne”:


“No era un militar, no era un espía de contrato, era un agente secreto que trabajaba para todos y los engañaba a todos. Su único interés era para si mismo”.
Rueda Rieu explica que González “actuaba por su cuenta, y se vendía a quién fuera, pero no lo digo en sentido despectivo. Ese era su trabajo”.
Sin duda una trayectoria impresionante, de un espía multifuncional que salió de las sombras y con su particular estilo novelado se dedicó a contar teorías controvertidas.




Para saber más

"Yo fuí espía de Franco"- González Mata- Argos

"Espías y traidores"-Fernando Rueda - La Esfera de los Libros-

"Espías españoles"- Pastor Petit-Argos

domingo, 5 de octubre de 2014

Guerra de Ifni-Sáhara. La gran guerra desconocida de España (I)

Posesiones españolas
Desde la Guerra Civil reinó más o menos la tranquilidad en el AOE, se crearon puestos en Ifni (Tamucha, Tlata y Tiliuin) y en el Sáhara (Hagunía, Bir Nzarán, Guelte Zemur), también se funda en 1938 el Aiún. Ya al final de la Segunda Guerra Mundial, con el debilitamiento de Europa surgen movimientos independentistas. En Marruecos aparece el Partido de la Independencia en febrero de 1944 y aparece la guerrilla del Ejército de Liberación. Harán 750 atentados, matarán a más de 300 franceses y harán 2.000 sabotajes, pero casi todo en zona francesa. A España se le tenía respeto. En 1953 Francia quitó a Mohamed V como rey y se exilió en Madagascar, se pone en su lugar a Muhamed Ben Arafa pero enseguida estallan disturbios. España no apoya la postura y nuestro jalifa, Muley Hassan, otorgó refugio a prófugos moros. Al final Mohamed V vuelve en 1955, los tiempos empezaban a cambiar para España, pues entraban en nuestras zonas muchos refugiados, que se intentaban devolver a zu zona lo antes posible. Para colmo esos meses, algún español tuvo la idea de hacer pegar impuestos a las tribus de nuestros territorios, no tenía sentido pues eran gente pobre y apenas molestaban. Los marroquíes lo aprovecharon contra nosotros. El 1er incidente es en Ifni, el 2 de enero de 1956, donde una multitud ocupa la mezquita y coloca la bandera marroquí, pero la policía los desaloja y en las cargas para expulsarlos, mataron 3 moros. También se hicieron detenciones y se comprobó, que venían de la zona francesa. El 25 de marzo, en Tan Tan los policías indígenas cometen un caso de desobediencia, teniendo que ir 2 Junkers con una sección de soldados españoles para calmar la situación. Enseguida se vio que los indígenas no eran de fiar. El 2 de marzo la zona francesa ya era independiente y el 7 de abril la española, pero no Ifni ni Tarfaya. Marruecos en época de protectorado, mantuvo estructuras de gobierno en varios asuntos. No como Argelia que actuaba como provincia francesa. Enseguida Marruecos crea si Ejército, con muchos guerrilleros del EL, en mayo desfilan en Rabat 14.000 soldados. Pero el EL, tenía 2 posturas una monárquica y otra republicana, por ello el monarca hizo una purga eliminando a 50 miembros pro-soviéticos. Pero todos tenían en común, acabar con la presencia extranjera. Por lo que enseguida se fueron a actuar al sur del país, estableciendo cuartel en Gulimin, al principio mantenían cierto respeto a España y se centraron contra Francia.
España fue demasiado tolerante. Enseguida en Ifni, se instalan oficinas del partido oficial de Marruecos, reclamando la soberanía de Ifni y Tarfaya. Ante la pasividad española, querían obligar a los coches a llevar matricula marroquí, hacer controles fronterizos y creando su propia policía. Afortunadamente los indígenas se hartaron y lo denunciaron, quedando vigilados. Para volver a caldear los ánimos, un capitán indígena es asesinado en mayo, un sargento en junio y 2 policías en julio. Enseguida se detuvo y expulso a los marroquíes, pero sin encontrar culpables. Los moros empezaron a cortar líneas telefónicas y carreteras, incluso el comercio. Pero España dio algún susto y en mes estaba todo arreglado, entonces se inició un verano demasiado tranquilo.
Interior del fuerte de Cabo Juby
 
Respecto al Sahara, no había nacionalismo. Pero aprovechando la debilidad el EL entró en el territorio y montó bases. En principio eran para atacar a Francia, que estaba en Mauritania, pero luego quería ir acercándose ir a la costa y echar a los españoles. En verano de 1957 se localizaron campamentos en Dra, Hamada, Guelta Zemmur, Jaraifia, Fondeadero de las Monjas, Uad Jauli, Ausert, Jelua y Gort Asumal. En total más de 1.500 hombres. Aparte en la zona de Gulimin, en Marruecos, había 5.000 hombres, con armas como morteros y camiones.
Columna española
 
El principal inconveniente era que España llevaba más de 15 años de paz y muchas fuerzas estaban algo “frías”, salvo la Legión, los aviadores y los paracaidistas. También que esos años los presupuestos de Defensa bajaron y apenas se renovó material. Había pocos elementos de transmisiones, no había blindados y las armas eran Mauser. La Armada tenía buques viejos y apenas estaban las dotaciones entrenadas para desembarcos. En el aire había que utilizar aviones como el Junkers 52 y el Heinkel 111 porque los acuerdos con las yanquis no nos dejaban usar reactores. Afortunadamente los pilotos estaban muy bien preparados. Aparte en su mayoría las fuerzas eran indígenas, como los Tiradores de Ifni, con 3 Tabores en Ifni y 1 en Sahara. 4 grupos de Policía Indígena, con 3 grupos en Sahara y 1 en Ifni. En Ifni había un grupo de obuses de 105 mm, Cias de Zapadores Intendencia y Sanidad.
 
Las principales fuentes para este trabajo son: "Breve historia de la Guerra de Ifni" (libro de Carlos Canales), diversas webs y testimonios de veteranos de la campaña, algunos números de la antigua revista "AOE: revista ilustrada del Africa Occidental española" y para el tema aéreo el libro de Emilio Herrera Alonso "Aire, agua, arena y fuego".

viernes, 3 de octubre de 2014

Hechos desconocidos y curiosidades de la Segunda Guerra Mundial

La mala puntería aliada: antes del desembarco en Normandía, los aliados hicieron feroces bombardeos a todos los territorios ocupados por Alemania, en Francia provocaron mucho más bajas que los alemanes en 1940. Para destruir carreteras y nudos ferroviarios. El 13 de marzo de 1944 la RAF destruyó 800 vagones de tren en Le Mans, pero mataron a 100 civiles. Entre el 9 y 10 de abril fue atacada por 186 bombarderos de la RAF, destruyeron 2.000 vagones y 50 trenes, matando 456 civiles y destruyendo 100 casas. El 11 en Gante, 22 Halifax canadienses en una operación similar murieron 438 civiles. Entre el 19 y el 20, 200 bombarderos canadienses fueron a por los trenes de Noisy-le-Sec, murieron 464 civiles e hirieron a 370. Se destruyeron 700 casas. El 3 de marzo de 1945 en Bezuidenhout (La Haya), murieron 500 civiles, intentando destruir una base de V-2. Y estos solo son unos pocos.    
Bombardeo de Brest (Bretaña francesa)
Vertido de gases: ignorando cualquier futura incidencia, los aliados vertieron al mar entre 1946 y 1947, 40.000 ton de gases venenosos animales, la mayoría líquidos. Incluyendo el Tabun. La mayoría se arrojó al Báltico. Eso sí, todos los países se quedaron pequeñas cantidades, para mejorar y hacer nuevas armas químicas.
Destrucción de Heligoland: actualmente esta pequeña isla alemana del mar del Norte, es lugar de vacaciones y tiene exenciones de impuestos en cosas como el tabaco. La historia de la isla se remonta a la Prehistoria, después con las guerras estuvo en distintas manos. En 697, se retiró allí el rey de Frisia, tras derrotarle los francos. En 1231, la ocupa Dinamarca. Hasta 1714, pasó varias veces a ésta y al condado alemán de Schleswig. Después hasta 1807 fue para Dinamarca, hasta que en 1807 la ocupan los ingleses que la ocupan hasta 1890, cuando la ceden a Alemania a cambio de que ésta renunciara a Zanzibar. La isla se convirtió en una importante base naval, durante la Gran Guerra se evacuaron los civiles. Hitler la reactivó y dejó estar allí a los civiles, que volvieron en 1918. Pero el 19 de abril de 1945, más de 1.000 bombarderos la atacaron, pero había solidos búnkeres y subterráneos. Solo hubo 128 muertos, casi todos soldados de artillería antiaérea. La noche siguiente evacuaron a los civiles. Acabada la guerra volvieron, pero al poco los ingleses ocupan la isla, los expulsan y la convierten en campo de tiro de la RAF hasta 1952. El 18 de abril de 1947 la Royal Navy puso 6.800 ton de explosivos en la isla para destruir todas las fortificaciones, tanto artilleras y refugios para submarinos. Pero aparte de eso, querían hacer desaparecer la isla, como dirían más tarde. La explosión fue tal, que numerosos sismógrafos del norte de Europa la detectaron. Se cree que ha sido la explosión convencional más grande hasta ahora. Lo mejor es que unas cuantas fortificaciones aguantaron, lo que habla muy a favor de los ingenieros alemanes. Los ingleses tuvieron que reconstruir lo dañado y la devolvieron a Alemania. Pero algunas zonas como Oberland quedaron destrozadas, quedando enormes cráteres que hoy todavía pueden verse.
Es interesante ver los ataques, desde "Exordio" traigo una lista bastante detallada de la intensa ofensiva aérea aliada que comenzó en agosto de 1944. Esto demuestra el abusivo ataque que recibieron estas pequeñas islas, pese a que había muchos objetivos de mayor interés militar. Parece que los ingleses sacaron a pasear su revanchismo.
El primero fue el 18 de diciembre de 1939, tres escuadrones de bombarderos de la RAF fueron enviados a atacar buques alemanes en Heligoland Bight.  Participaron 24 bombarderos Vickers Wellingtons, de los cuales dos regresaron debido a problemas mecánicos.  La respuesta alemana fue inmediata y los cazas alemanes causaron tanto daño a los británicos que decidieron no realizar más ataques diurnos.
 
Bombardeos y minados de Heligoland durante la Segunda Guerra Mundial
Fecha/ObjetivoMisión
11, 19 y 24 agosto 1944 El 466º Escuadrón RAF realizó operaciones de minado.
18 abril 1944El 466º Escuadrón RAF realizó operaciones de bombardeo.
29 agosto 1944Misión 584: 11 bombarderos B-17 y 34 bombarderos Liberator B-24 bombardearon Heligoland; 3 B-24 resultaron dañados.  Fueron escoltados por 169 Lightning P-38 y Mustang P-51 Mustang; 7 P-51s fueron derribados.
3 setiembre 1944Operación Aphrodite: El B-17 63954 intentó destruir los pens de U-Boot, pero fracasó porque confundió la isla Düne con la isla Oberland.
11 setiembre 1944Operation Aphrodite: El B-17 30180 Intentó nuevamente bombardear los pens de los U-Boots pero fue derribado por la artillería antiaérea y cayó al mar.
29/30 setiembre 194415 aviones Lancasters realizaron una operación de minado en el Kattegat y alrededores de Heligoland.
5/6 octubre 194410 aviones Halifax realizaron operaciones de minado en los alrededores de Heligoland.
15 octubre 1944Operation Aphrodite: El B-17 30039 *Liberty Belle* y el B-17 37743 intentaron bombardear los pens de U-Boots, destruyendo barracas en Unterland.
26/27 octubre 194410 aviones Lancasters del 1º Grupo de Bombardeo realizaron una operación de minado en los alrededores de Heligoland.  Un Lancaster fue derribado.  La isla fue evacuada la noche siguiente.
22/23 noviembre 194417 aviones Lancaster minaron las aguas de Heligoland y la desembocadura del río Elba.
23 noviembre 19444 aviones Mosquito realizaron una misión de patrulla y observación en la zona de Heligoland.
31 diciembre 1944Misión 772, 1 avión B-17 bombardeó la isla Heligoland.
4/5 febrero 194515 aviones Lancasters y 12 Halifax minaron las aguas de Heligoland y la desembocadura del Río Elba.
16/17 marzo 194512 aviones Halifax y 12 Lancaster minaron el Kattegat y los alrededores de Heligoland.
18 abril 1945969 aviones, de ellos 617 Lancaster, 332 Halifax, 20 Mosquito bombardearon la Base Naval, el campo aéreo y el pueblo.  3 aviones Halifax fueron derribados. Las islas fueron evacuadas al siguiente día.
19 abril 194536 aviones Lancaster de los escuadrones 9º y 617º atacaron las posiciones de las baterías costeras con bombas Tallboy.
 
Heligoland actualmente
 
El puerto militar, antes de la guerra
 

miércoles, 1 de octubre de 2014

La invasion de Bujaruelo. Cuando las tropas de Hitler entraron en España

Bujaruelo actualmente
 
En 2002, el “Heraldo de Aragón” sacó a la luz a raíz de una investigación sobre la gente que huyo por los Pirineos a España, de los nazis. Entre 1942 y 1944 se detuvieron por ello 300 personas y se llevaron a Miranda de Ebro. Pero lo más impactante fue que encontraron un documento oficial que revela que en junio de 1943 Bujaruelo ( n el Parque de Ordesa) fue ocupado momentáneamente por tropas alemanas. El lugar exacto fue el paraje entre Torla y el Balneario de Panticosa. El documento estuvo oculto durante el franquismo. El encuentro fue entre la Guardia Civil y la Wehrmacht, pero no hubo problemas e incluso al final ambos se tomaron unos cafés. Los alemanes eran de la Brigada de Montaña “Baviera”, que estaban en el lado francés del Pirineo aragonés desde noviembre de 1942, con la ocupación de la Francia de Vichy. Entraron en España porque perseguían a 2 miembros de la resistencia, los 2 franceses iban guiados por Miguel Pintado, que llevaba a gente de la resistencia a zona española y el mismo era miembro de ésta. Se le llamaba el “cartero de Bujaruelo”, pues llevaba cartas al cónsul francés, Robert Lamit, que colaboraba con ellos era gaullista. Pero ese día, la frontera no les sirvió, se refugiaron en Torla, mientras los alemanes los perseguían y registraron registraron las casas de Bujaruelo. La actitud fue siempre correcta, pero los 6 guardias civiles que había no evitaron la entrada de los alemanes. En el lugar había pocas casas y hoy solo sobreviven un mesón del siglo XII los restos de una iglesia. Como curiosidad cabe destacar que hubo tropas alemanas legalmente en la estación de Canfranc pues una parte era de España y otra de España, pese a estar en Aragón. También se sabe que cerca del puesto del Portale, en el hotel “Baresse” se alojaban los alemanes. Allí fueron detenidos por la X Brigada de la resistencia, 50 soldados, pues estaban en zona francesa. 
Es interesante la historia de Pintado, cuyo mesónera regentado por su familia desde 1928. Lo que le vino bien para cruzar la frontera. Miguel Pintado, un muchacho que ayudaba en casa como pastor de un rebaño de vacas, pasaba la frontera con el ganado a los pastos franceses sin problemas por el tratado de la Passerie, que permitía a los ganaderos cruzar a Francia desde finales de Julio a principios de Noviembre. En estas "visitas" al país vecino solía encontrarse con sus compañeros de la escuela de Gèdre donde aprendió a leer y escribir.
Con casi 16 años Miguel en plena guerra civil estuvo reclutado por el ejercito republicano en la periferia del "túnel del Cotefablo" cavando trincheras. Un día se enteró que los milicianos entraron en su pueblo y acabaron con la vida del párroco, una persona a la que Miguel tenia mucho aprecio.
Después de conocer esta mala noticia se "pasó" al bando nacional luchado en los frentes de Teruel y Castellón. Una vez finalizada la guerra estuvo tres años en Cadiz, en un campo de prisioneros como vigilante.

Al final de 1942 regresa al pueblo, en el momento que la totalidad de Francia estaba en poder del ejercito alemán. Siguió con su vida normal, frecuentemente pasaba a Francia con el rebaño, un día de estos cruces de frontera, tuvo un encuentro con viejos compañeros de Gèdre, los cuales le solicitaron su ayuda. Se le pidió que fuera el "cartero" de la Resistencia, consistente en enviar informes secretos. Esta amistad adquirida en sus tiempos de estudiante fue su razón, más que la política.
En un principio se acercaba a Gavarnie a por el correo y otras veces hacia de guía a oficiales franceses hasta el pueblo de Sabiñánigo. Estas acciones estaba en conocimiento de los carabineros del puesto de Bujaruelo, en alguna ocasión vieron como se escondían miembros de la resistencia francesa en el mesón o en las cuevas de los alrededores. Las cartas las entregaba  en Torla o Sabiñánigo para evitar sospechas, en este ultima localidad mantenía contactos con Robert Lamit, cónsul francés y director de la empresa de aluminios Pechiney. Colaborador junto con Albert Le Lay (jefe de la aduana francesa en la estación de Canfranc) del espionaje aliado en Aragón. Un hecho destacado por parte de Lamit, ocurrido el 23 de septiembre de 1943, fue el envío de un coche a Canfranc para salvar a su amigo y cooperador Le Lay del arresto y posible ejecución por parte de la Gestapo que sospechaba de él. Inició la ruta de escape en España por Zaragoza, Madrid y finalmente a Sevilla, dado el paso de continente desde Gibraltar a Argelia.